martes, 16 de septiembre de 2014

Simplemente lo entiendes




Las personas tienen derecho a cantar con los pulmones llenos de ansias por gritar. 

Derriban muros y sueltan demonios que llevan dentro. El problema asoma la cabeza 
cuando esos sentimientos derriban a personas que te impulsan para chillar o que intentan 
que no tengas motivos para hacerlo. Desventajas de estar en primera fila en batallas donde no puedes crear un plan de ataque.


Todos tenemos guerras, todos intentamos no ahogarnos y todos luchamos por un suspiro de salvación.



Pero no es justo que otros ganen títulos que sirven de algo cuando ellos no sirven para nada. No es justo recriminar a inocentes y premiar a culpables. No es justo que un juez no sea consciente de quién debe acarrear con lo malo.
Y quizás, sólo quizás, con tu desahogo robaste aire a alguien que lo está necesitando. Pero intenta con cuerpo y alma no pedirlo.
Hay problemas, como toda gran historia, hay silencios que ensordecen y hay cosas que pasan. Pero son cosas de las que una no puede presumir, así que finjamos que no existen.

Sin embargo al gritar uno aprieta el gatillo cuyo objetivo son los sentimientos de otra persona. Y en el momento de histeria lo aprietas repetidas veces, hasta llegar a esa sensación que llamarías "alivio". Pero ahí disparas sin quererlo, ahí sueltas balas con forma de palabra y no hay hospital o centro que las sane. Y puedes notar sin verlo que has herido y no era tu intención, pero ni siquiera un "perdón" llega... como echar sal a esas heridas.


Sabemos herir y nos sentimos mejor cuando alcanzamos la diana, cuando damos justo en el objetivo enmascarado. Pero qué error tan grande cometemos así de solos.





Esto es una pista de baile, al fin y al cabo. Yo me quedo sentada, mordiéndome el labio inferior cuando suena mi canción favorita, acompañando el ritmo con el pie y deseando en cada pestañear que alguien tienda su mano antes de que llegue el estribillo.

Hasta hace relativamente poco sabría que me quedaría ahí durante toda la canción, en esa silla a punto de romper, que me quedaría ahí incluso todo el espectáculo. 

Menos mal que quedan personas de las que te sacan a bailar.

O te sacan de tu piscina.


El único requisito que hay para contar estrellas es poder contar con esas personas.

2 comentarios:

  1. Y son esas personas las que te ofrecen su ayuda cuando más lo necesitas. Ni por todas las estrellas del universo las cambiaría. Cada una de ellas es una estrella en sí, única. Me salta una lagrimilla cuando leo cosas así de bonitas.

    Un abrazo,

    Pami

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  2. Jo! Por qué no vi esto ayer?
    Igualmente a sido genial leerlo, están cierto. Y el comentario de Pami hace que yo ya no tenga ya nada que decir, es justo lo que ha dicho lo que mi mente querría compartir

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Los comentarios siempre equivalen a una sonrisa, ¿te atreves?